Sigue existiendo polémica sobre los efectos positivos y negativos de la píldora anticonceptiva y otros métodos anticonceptivos hormonales y las ventajas de los periodos de descanso, es decir, si es necesario tener la menstruación.
El ciclo de toma de la píldora (ingesta durante tres semanas y un tiempo de descanso o de placebo) realmente no se originó por razones médicas.
El debate sobre si es necesario el periodo de descanso es extenso. En 1999, el libro “¿Es obsoleta la menstruación?” de Elsimar Coutinho y Sheldon S. Segal, llegaba a afirmar que la ovulación incesante no cumple ningún propósito salvo el reproductivo. En el 2000, Malcolm Gladwell, no del campo de la medicina, sino periodista y sociólogo, también secundó esta teoría.
En la misma línea, en los últimos días se ha publicado su estudio “Análisis del uso de métodos anticonceptivos y su impacto en la mejora de la calidad de vida”. La investigación contó con una muestra de 1800 mujeres de 14 a 49 años. El 69,2% de las mujeres afirmó que la regla afectaba su calidad de vida. El 45, 4% experimenta molestias en la vida cotidiana, un 30% ve alteradas sus horas de sueño y el 20% ve mermadas sus relaciones sociales y de ocio. No obstante, el 69,2 no quiere dejar de tenerla.
El 73,8% está de acuerdo con que “la regla es un proceso de desintoxicación necesario”. El 64, 8% piensa que son necesarios los periodos de descanso y al 50% le preocupan los efectos secundarios de los anticonceptivos hormonales. Se cree que estos efectos secundarios son un mito ya que dichos anticonceptivos suponen: “cantidad de beneficios y los efectos secundarios que tienen no afectan de forma importante a la salud a las mujeres”. Tampoco creen necesario el descanso.
¿La píldora puede ocasionar efectos secundarios?
Las voces críticas señalan que la menstruación es un proceso natural, que las molestias que nos afectan vienen también al interiorizar los mensajes negativos de la sociedad. Y, sobre todo, que las pastillas anticonceptivas sí pueden tener algunos efectos secundarios. Es cierto que pueden ser recetadas bajo control médico para algunos casos no anticonceptivos, pero en otros pueden estar contraindicadas. Sobre su relación con el aumento de peso o su efecto anti-androgénico (acné y vello), mientras que en algunos casos ayudan a regular el ciclo y previenen estos síntomas (incluso se vinculan con la prevención de algunos tipos de cáncer u otras enfermedades), en otros historiales pueden producir el efecto contrario. Recientemente, una investigación del Instituto Karolinska de Suecia vinculaba el uso de la píldora con la depresión. Recomendamos leer los artículos que publicamos periódicamente sobre anticonceptivos y sus efectos positivos y negativos. Lo más aconsejable es seguir el consejo de profesionales médicos, consultar el prospecto y probar el método más recomendado para cada mujer.
También hay científicas y científicos que advierten que no existen estudios de los efectos a largo plazo de eliminar la ovulación y la menstruación. Cada persona debe informarse de su situación en particular para tomar una decisión libre e informada.