Acabas de ser madre y tras la llegada del bebé cambiará tu vida y tendrás que asumir mayores responsabilidades. Te sientes cansada y sientes multitud de emociones y sentimientos. Las seis primeras semanas tras el nacimiento es la etapa llamada puerperio, y en ella la mujer experimenta diversos cambios hasta que su cuerpo se normaliza.
Loquios: es el fluido que expulsa la mujer tras el parto que está compuesto por sangre, restos de placenta y de fibras uterinas. Poco a poco este flujo será más claro hasta desaparecer. Es importante la higiene íntima utilizando compresas y cambiarlas frecuentemente. La lactancia favorece que el útero se contraiga antes y que este sangrado dure menos tiempo.
Entuertos: durante 4-5 días puedes sentir fuertes dolores tipo contracción (las primerizas no suelen notarlos). Favorecen que el útero vuelva a su tamaño y posición y que cierren los vasos sanguíneos. Si son muy intensos, puedes tomar analgésicos compatibles con la lactancia.
Episiotomía: es la incisión que a veces se realiza para facilitar el parto. Los puntos de esta sutura se caen solos o se reabsorben. Es importante cuidar esta herida y mantener una buena higiene para evitar infecciones.
Los pechos sufren cambios: se hinchan y se vuelven más sensibles por la producción de leche materna (subida de la leche). También puede haber dolor en los pezones por la succión del bebé. Si estas molestias persisten consulta a tu matrona o a un profesional, que te ayudará a mejorar la posición al amamantar.
Reeducación perineal: el perineo o suelo pélvico es el conjunto de músculos y ligamentos de la parte inferior de la pelvis, que durante el embarazo y parto sufren considerablemente. Por esta razón, se recomienda a las madres una reeducación especial de esta parte del cuerpo. Consulta a tu matrona o ginecólogo sobre estas sesiones para muscular el suelo pélvico y así evitar la incontinencia urinaria o el prolapso (descenso de órganos).
Alimentación y recuperación de tu peso: debes tener paciencia para recuperar tu silueta. Aliméntate de una forma sana y equilibrada, bebiendo mucha agua y evitando las comidas procesadas y las excesivas grasas y dulces, además de realizar actividad física suave.
Actividad física tras el parto: En función de la mujer y de sus condiciones físicas, el cuerpo se sobrepone más o menos rápido al parto. No obstante, lo más común es tener que esperar entre uno o dos meses y que la reeducación perineal haya finalizado antes de retomar la actividad física (que al principio tendrá que ser muy suave).
Al principio elije una actividad relajada (gimnasia en grupo o natación). El inicio debe ser muy suave. Las actividades “violentas” (las que exigen correr o saltar) es mejor evitarlas, de momento.
También puedes realizar algunos ejercicios sencillos en casa para tonificar músculos que se han debilitado durante el embarazo o para ir perdiendo peso de un modo armonioso y duradero.
Sueño tras el parto
También debes dedicar tiempo a descansar. Aprovecha los ratos en los que el bebé duerme para echarte una siesta.
En Gynemedic México te podemos ayudar a recuperarte con nuestras diferentes unidades médicas, tanto a nivel emocional, nutricional y del cuidado del perineo.